Tardes de Miel y Canela

Un Domingo. Diez y media de la noche. Cenando. Suena el teléfono. ¿Por qué suena el teléfono justo en el momento del día en que has cerrado la puerta y te has despedido del mundo exterior?.¿no saben que madrugamos?
J descuelga. Es su madre. Escucho media conversación. Básicamente monosílabos del tipo: “sí”, “ya”, “vale” "los tomates bien", "el tiempo nublado". Fin de la conversación. Menos mal hoy no le ha dejado nokeado con alguna muerte de alguien o alguna dolencia de ella.

Como siempre desde hace años, el preguntar por mis hijas es igual que preguntar por el tiempo o las verduras...nunca habla con ellas a no ser que cojan el teléfono. Llama de mes en mes y a horas económicas... por supuesto. Que pena, nunca han venido al Cole en el día de los abuelos, nunca ha habido un regalo envuelto en navidad, nunca un abrazo, un ay que guapa está mi nieta, nunca un detalle, una sopita caliente ni un cuarto con sábanas limpitas y perfumadas para las niñas. Siendo bebés me llevaba la estufa y hasta la comida. Es su madre y punto. Yo hace años que marqué distancias, me harté de desplantes y faltas de roce. Me hace gracia la frasecita: Ella es asi y hay que perdonarla...¿perdonarla o educarla?. Mi experiencia personal debe de servir a mis hijas para el día de mañana, porque dos personas pueden quererse mucho pero es crucial que pertenezcan a ambientes similares, sino la familia puede acabar con la relación definitivamente a no ser que uno haga una raya en el suelo y separe los dos mundos.

No soy nada insensible y se me gana facilmente, pero en este caso y despues de muchas atenciones por mi parte y muchas guantadas sin mano por la suya, llegó un momento que era insufrible pasar un rato en su casa, manias, gritos y actitudes fuera de lugar me estaban afectando sobremanera. ¿La educación que recibió, el medio ambiente, las circunstancias?...No, nada es motivo de esa falta de demostración de cariño y yo lo considero impropio e intolerable. Hoy por hoy sigo sin comprenderla y mucho menos perdonarla, no por mi pero si por mis hijas, que no saben lo que es un abrazo y un beso espontáneo de ella...